Hierba aromática
Planta anual o bianual que no desarrolla un tejido leñoso persistente, caracterizada por presentar un aroma agradable y cuyas hojas, tallos, semillas y raíces se utilizan tradicionalmente tanto en la cocina (en fresco), como fuera de ella (tratamientos de belleza, remedios naturales contra enfermedades, rituales, ambientadores, etc.).
Entre otras definiciones, se puede decir que las hierbas son plantas con tejidos suaves y suculentos, pocas veces leñosos, usadas en el arte culinario como condimento o con propósitos medicinales. En general, podemos concluir que las hierbas aromáticas son plantas olorosas cuyas hojas, raíces, tallos o flores son usados en la sociedad por sus propiedades medicinales o culinarias.
Éstas se utilizan en estado fresco, lo más recomendado, o en seco; que deben emplearse en menor cantidad, ya que la concentración de los activos es mayor.
Componentes activos
Las plantas aromáticas suelen desarrollarse en las regiones subtropicales y templadas, ya que las condiciones ambientales favorables de luz, temperatura y agua permiten que la planta elabore metabolismos secundarios.
No se conoce la función biológica de muchos de ellos, aunque se cree que sirven de defensa para la planta y que combaten el crecimiento de otras plantas en su entorno.
Estas sustancias o componentes activos no suelen encontrarse repartidos de forma uniforme por toda la planta, sino que se acumulan en determinadas áreas, como la raíz,, los frutos, la corteza o las sumidades florales.
Usos y conocimientos
El uso de las hierbas estuvo restringido al área geográfica en la que creían, por lo que su conocimiento y aplicación era local, y también la transmisión de sus usos.
Su difusión varió con la comercialización de las especias procedentes de otros continentes.
Propiedades medicinales
Los componentes activos tienen diferentes efectos en nuestro organismo, desde la desinfección de heridas, aplicando un cataplasma milenrama, al incremento de la producción de leche de las madres en época de lactancia mediante el consumo en infusión del cardo mariano o la albahaca.
Las propiedades son infinitas y las debemos conocer a la perfección antes de aplicarlas, ya que un mal uso de las plantas puede conllevar problemas de salud entre otros.
Propiedades culinarias
Además de otorgar sabor, color y olor a las comidas, facilitan la digestión de las grasas, al estimular la producción de los jugos gástricos, como el romero en las carnes, o reducen la formación de gases y aumentan su expulsión, como el anís.
Propiedades en la belleza
Existen remedios populares de belleza que usan plantas: las decocciones y lavados con manzanilla reducen la formación de bolsas bajo los ojos y el aceite de coco es un excelente hidratante.