Abedul

Betula pendula

Familia de las Betuláceas

Descripción:

Árbol caducifolio de unos 25-30 metros de alto, corteza blanca, jaspeada de negro y su copa ligera y poco densa.

Aroma:

Las hojas del abedul tienen un intenso aroma y algunos poetas, como José María Eguren, hacen referencia a ello en sus obras.

Obtención y partes empleadas:

Yemas, corteza y savia en primavera, las hojas entre junio y septiembre y se dejan secar a la sombra o en un secadero a 40 grados aprox.

Propiedades:

Diurética, depurativa, antiséptica, cicatrizante, antirreumática, dermatológica, sudorífera.

Aplicaciones

Terapéuticas: Para cálculos renales y de vejiga, para depurar el organismo, diuresis, contra la uricemia y la gota. Para dermatosis, dolores reumáticos, colesterol alto, llagas y heridas.

Cosméticas: La savia tiene aplicación como tónico capilar y la esencia sirve como materia prima para la elaboración de cosméticos.

Propiedades mágicas y esotéricas:

Sirve para protección, exorcismos y purificaciones.

Curiosidades:

Las escobas de bruja se hacían con las ramitas del abedul, atadas alrededor con otras ramas de fresno y un bastón de sauce.

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